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¿Para qué sirve comer alimentos ricos en omega 3?

Por Eloísa Carmona - September 2021
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Los beneficios para los que sirve el omega 3 son tan populares y variados, que van desde ayudarte a bajar los triglicéridos, hasta ayudar a prevenir el asma o mejorar síntomas del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).

Los ácidos grasos omega-3 son vitales para la salud y puedes obtenerlos de pescados o mariscos grasos, pero si no los consumes con frecuencia, puedes considerar tomar un suplemento de omega-3, lo cual es una forma sencilla pero eficaz de mejorar tanto su salud física como mental. Además, de que puede ayudarte reducir riesgos de enfermedades.

Qué son los ácidos grasos omega 3 y para qué sirven en el cuerpo humano

Los omega-3 son una familia de ácidos grasos esenciales que el cuerpo no puede producir por sí solo, sino que debe obtenerlos de la dieta diaria, pues desempeñan funciones importantes en el organismo y proporcionan una serie de beneficios para la salud.

Existen varios tipos de estos ácidos grasos, pero los tres tipos más importantes son ácido alfa-linolénico (ALA), ácido docosahexaenoico (DHA) y ácido eicosapentaenoico (EPA). El ALA se encuentra principalmente en las plantas, mientras que el DHA y el EPA se encuentran principalmente en los alimentos de origen animal y las algas.

Los alimentos con alto contenido de ácidos grasos omega-3 más comunes para incluir en tu dieta son los pescados grasos, aceites de pescado, semillas de linaza, semillas de chía, aceite de linaza y las nueces, y si no consumes muchos de estos alimentos, es recomendable tomar un suplemento de omega-3, como aceite de pescado o aceite de algas.

Ácido docosahexaenoico DHA
El ácido docosahexaenoico o DHA es el ácido graso omega-3 más importante para tu cuerpo, pues es un componente estructural clave del cerebro, la retina de los ojos y muchas otras partes del cuerpo.

Se encuentra principalmente en productos animales como pescados grasos y aceite de pescado, pero la carne, los huevos y los lácteos de animales alimentados con pasto también tienden a contener cantidades significativas.

Los vegetarianos y veganos a menudo carecen de DHA y deben tomar suplementos de microalgas para asegurarse de obtener suficiente cantidad de este omega-3.

Ácido alfa-linolénico ALA
El ácido alfa-linolénico (ALA) es el ácido graso omega-3 más común y el cuerpo lo usa principalmente para obtener energía, pero también se puede convertir en formas biológicamente activas de omega-3, EPA y DHA, sin embargo, este proceso de conversión es ineficaz y sólo un pequeño porcentaje de ALA se convierte en formularios activos.

El ALA se encuentra en alimentos como semillas de lino, aceite de linaza, aceite de canola, semillas de chía, nueces, semillas de cáñamo y soja.

Ácido eicosapentaenoico EPA
El ácido eicosapentaenoico (EPA) se encuentra principalmente en productos animales, como pescados grasos y aceite de pescado, pero también algunas microalgas lo contienen. Tiene varias funciones en el cuerpo y parte de él se puede convertir en DHA.

Los ácidos grasos omega-3, particularmente el DHA, son vitales para el cerebro y la retina, y en particular, son importantes para las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, ya que puede afectar la salud y la inteligencia del bebé.

Entre los beneficios para la salud de los adultos, los estudios indican que una ingesta suficiente de omega-3 puede proteger contra todo tipo de enfermedades, incluido el cáncer de mama, la depresión, el TDAH y diversas enfermedades inflamatorias.

Omega-6 y omega-3
Los ácidos grasos omega-6 también tienen funciones en el cuerpo importantes y similares a las de los omega-3. Por ejemplo, ambos se utilizan para producir moléculas de señalización llamadas eicosanoides, que tienen varias funciones relacionadas con la inflamación y la coagulación de la sangre.

Sin embargo, los omega-3 son antiinflamatorios y los científicos plantean la hipótesis de que comer demasiado omega-6 contrarresta estos efectos beneficiosos. En la dieta occidental, la ingesta de omega-6 es muy alta en comparación con la de omega-3, por lo que actualmente la proporción está muy sesgada hacia el lado de los omega-6.

Mantener un equilibrio entre estas dos grasas puede ser importante para una salud óptima y aunque no existe evidencia suficiente para demostrar que el omega-6 es dañino, la mayoría de los profesionales de la salud están de acuerdo en que obtener suficiente omega-3 es importante para la salud.