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Opciones y tips de maridaje para Navidad

Por Shadia Asencio - December 2020
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En esta ocasión, la carta editorial madruga 24 horas porque la Navidad no se hace esperar. En las bocinas suenan los villancicos. La casa ya huele a las preparaciones del horno. Todo es felicidad, pero ¿ya sabes qué servirás de beber? Casi siempre pensamos en los brebajes hasta el último momento. No importa lo que te guste –o lo que tengas a la mano–, queremos que disfrutes tu cena al máximo con algunos consejos de maridajes prácticos.
¿Maridaje sólo con vino?
No hay comida sin bebida y viceversa. Pero la bebida tampoco es sinónimo de alcohol. El maridaje puede hacerse con el líquido que más te guste. El sommelier Marcos Flores, presidente de la Alianza Panamericana de Sommeliers, dice que, en caso de abstinencia, el mejor aliado de la cena navideña son los tés, los ponches y las aguas frescas. Él recomienda acompañar los romeritos con un té pu-erh o té rojo; el típico bacalao a la Vizcaína con un té oolong; la pierna enchilada con agua de jamaica y jengibre y los ponches, con el pavo ahumado.
Si prefieres las cervezas, la regla básica es maridar las claras o ámbar con platillos de menor estructura –ensaladas, purés, bacalao– y elegir cervezas oscuras y densas para platillos con mayor fuerza o que hayan pasado por el horno como los romeritos con mole, el lomo o la pierna. En ambas partes se resaltarán las notas de caramelización.
A mí en lo particular me gusta combinar los vinos mexicanos de uva malbec con el lomo de cerdo. Me gusta mucho el Guanamé Malbec 2017 para un trozo de carne cubierto por gravy. Para una pasta cremosa elige un blanco con barrica como un Wente Chardonnay Riva Ranch, y para unos romeritos, un espumoso rosado que le haga frente al picor –como el cava español Roger Goulart Coral Rosé–. El rey de la mesa navideña, el pavo, sírvelo junto a una copa de tinto ligero de la uva pinot noir o merlot como el Cousiño Macul Antiguas Reservas Merlot cuyos aromas ligeros a especias y frutos rojos lo armonizarán como Mozart.
Las copasSi vas a servir cerveza, lo mejor es verterla en un tarro ¬–incluso en ese Mason Jar con asa que guardas en la alacena– para no calentarla y conservarla fría por más tiempo. Las copas especiales para cerveza suelen tener un vidrio más denso y un fuste o tallo más grueso para que las manos no les transmitan calor. 
En el caso del vino, el tamaño de la copa influye en la cantidad de aire que entra y oxigena al vino y con ello, la potencia de los aromas y sabores cambiará. Entre más estructurado y complejo sea un vino, más amplia deberá ser la copa (como la copa borgoñona).
En caso de que tengas dos tipos de copas, sirve el vino blanco en la más pequeña y el tinto, en la más grande o en la que tiene la boca más abierta. Lo ideal es servir la champaña o los vinos espumosos en una copa flauta para favorecer el desarrollo de las burbujas, pero si no tienes, en una copa de vino blanco irá perfecto. 
La temperatura¿Te imaginas un caldo de camarón tibio como el purgatorio? ¿Un pay de manzana gélido como el invierno? No hay de otra: debemos tomar en cuenta la temperatura en bebidas y alimentos. En las cervezas y los vinos exhiben o esconden los aromas y sabores. Por ejemplo, la forma ideal de tomar una cerveza con 4 a 6 grados de alcohol son los 3° C de temperatura. Esas que van a partir de los 7 grados, sírvelas entre 12 y 14° C. 
En cuanto a los vinos, a mí por lo general, me gusta que estén un poco fríos. La regla es que los espumosos vayan a 8º C para gozar su carbonatación (sus burbujas). Te recomiendo servir los blancos entre 7 y 11º C, pero si tienen barrica sírvelos a unos 10 o 12º C. Los vinos tintos ligeros y sin mucho envejecimiento, van bien con una temperatura de 13 a 14º C. Los vinos más corpulentos como una mezcla bordelesa, un riojano o uno de guarda déjalos de 17 a 18º C. ¿Tienes por ahí un vino de postre o un encabezado como el oporto? Sírvelo a 14º C para mantener ese dulce equilibrio y estructura.  
Y claro, recuerda que el control lo pones tú. Vive una feliz Navidad cuidando tu cuerpo y sin excesos. ¡Esa es la mejor forma de celebrar!