Una ensalada muy sencilla, ligera, saludable y llena de sabor. Perfecta para disfrutar durante el lunch o como una entrada. Es ideal para preparar una noche antes y llevarla a donde prefieras.
Lava las hojas de espinacas baby y sécalas bien. Si no tienes espinacas baby puedes utilizar espinacas regulares, simplemente córtalas en trozos mas o menos de 5 cm por lado.
Coloca un poco de aceite en una cacerola para sazonar. Yo utilizo aceite de coco por sus propiedades nutritivas y que no salpica mucho una vez caliente, sin embargo tu puedes utilizar el que mas te guste o el que tengas a la mano.
Añade pimienta y el chile quebrado al gusto para sazonar los champiñones.
Retira los champiñones salteados del fuego y ponlos en un refractario.
Agrega más aceite a la cacerola y agrega el cebollín hasta que desprenda aroma.
Saltea las espinacas. Esto lo debes hacer de poco en poco para asegurar una buena cocción de las mismas.
Puedes comenzar con un puño de espinacas y, cuando estas tomen un color verde oscuro, agrega otro puño; y así sucesivamente hasta que tengas todas las espinacas en el sartén.
Agrega sal al gusto.
Una vez que las espinacas estén cocidas, agrega los champiñones a la cacerola y mezclalos por unos segundos solo para que no estén fríos al servir.
Sirve las espinacas en los respectivos platos y agrega los trozos de queso de cabra encima.
Rocía la ensalada con un poco de jugo de limón para darle un toque fresco.
Información nutricional
* * Información por porción de 100g, porcentaje de valores diarios basado en una dieta de 2,000 calorías.
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