Primero quitamos la tripa a la longaniza y la desmenuzamos.
Calentamos una sartén amplia con un chorrito de aceite. Ponemos la carne, tapada, que se vaya haciendo con sus propios jugos.
La sacamos y la acabamos de machacar con un tenedor o espátula, ya que suele quedar apelmazada. La reservamos.
En la misma sartén ponemos la cebolla y la zanahoria bien picada con un chorrito de aceite de oliva y el laurel, salpimentamos.
Cuando esté doradito añadimos el tomate triturado y lo dejamos que se vaya haciendo, para que reduzca. Rectificamos de sal y agregamos 1 cucharadita de azúcar (para matarle la acidez).
Ponemos a cocer la pasta en agua con sal.
Vamos controlando la salsa y removiendo. Cuando el tomate haya reducido y esté un poco más espeso, bajamos el fuego al mínimo y añadimos la longaniza préviamente reservada y el romero opcionalmente.
Cocemos la pasta hasta que esté al dente o al punto que nos guste a nosotros, sobre unos 8-10 minutos. Entonces la colamos, que no quede nada de agua.
La ponemos en los platos y añadimos 3-4 cucharadas de bolognesa sobre cada montoncito de spaghetti.
Información nutricional
* * Información por porción de 100g, porcentaje de valores diarios basado en una dieta de 2,000 calorías.
¿Quieres saber qué otros nutrientes tiene ésta u otras recetas?