En una cacerola grande, agregar el cacao, el azúcar, la maicena y la sal. Mezclar con un batidor y luego añadir la leche poco a poco sin dejar de batir para ayudar a diluir y disolver el polvo sin que se formen grumos.
Añadir la nata y batir bien a mano.
Nota: la opción de la leche y la crema depende de tus gustos o restricciones: para un postre ligero, optar por la leche desnatada y hasta una crema de leche semi-desnatada más ligero. Para un postre libre de lácteos, elija una leche de soja y la nata de soja para cocinar.
Coloque la cacerola a fuego medio-alto, mientras se agita constantemente, llevar la mezcla a ebullición, cuando la aparición de pequeñas burbujas, reduzca el fuego y cocine a fuego lento, revolviendo durante 1 minuto o hasta que la mezcla se espese.
Fuera del fuego, añadir el chocolate, cortado en trozos y mezclar suavemente hasta que se derrita por completo. Agregue la vainilla y mezclar.
Distribuir inmediatamente la crema de chocolate en los moldes y cubrir la superficie directamente en contacto con una envoltura de plástico (ésta precaución evita la formación de una superficie de la piel gruesa). Coloque en el refrigerador y deje reposar por 4 horas.
Información nutricional
* * Información por porción de 100g, porcentaje de valores diarios basado en una dieta de 2,000 calorías.
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