Separar las yemas de las claras de los huevos.
Batir las tres yemas con la mitad del azúcar y el café hasta que quede cremoso.
Levantar las claras a punto de nieve, ayudándose del azúcar restante.
Añadir al batido de yemas y café, removiendo constantemente, por este orden y poco a poco, la nata, las claras montadas y el resto del azúcar.
Hacer que la mezcla quede homogénea. Ponerla en un recipiente, o directamente en las copas a servir y poner el helado en el congelador del frigorífico durante dos horas como mínimo.
Este postre puedes presentarlo bonito, utlizando una cuchara de helado, haciendo una o dos bolas en una copa y espolvorear con chocolate en polvo o mejor fundido y añadir unos granos de café de decoración. ¡Ummmm qué postre más rico!
Información nutricional
* * Información por porción de 100g, porcentaje de valores diarios basado en una dieta de 2,000 calorías.
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