Usualmente los niños reciben un lunch (menú escolar) que suele ser monótono o aburrido, y en ocasiones nada nutritivo, gracias a su falta de falta de variedad, de verduras, frutas y legumbres.
Asimismo, muchas veces los mismos menús escolares están adicionandos con dulces o postres altos en azúcar y grasas saturadas.
¿Cómo lograr un menú escolar nutritivo y delicioso?
En KiwiBlóg te queremos destacar que uno de los objetivos principales del menú escolar (lunch) debe impulsar una dieta equilibrada mediante la variedad de alimentos, preparaciones y texturas, dando prioridad a los alimentos más conflictivos en la alimentación de los pequeños -legumbres, pescado, frutas y verduras-, y basándose en las raciones y en la frecuencia recomendadas para cada edad.
Actualmente el equipo responsable del comedor o la empresa que administra la alimentación de las escuelas o centros educativos, cuenta con asesoramiento dietético a la hora de diseñar los menús. Pero el equilibrio nutricional no se consigue sólo con la comida del mediodía, aunque ésta suponga cerca del 35% de la energía diaria que necesitan los niños. Es necesario que el desayuno y la cena complementen la comida, y ahí entran los padres y su responsabilidad para educar a sus hijos en buenos hábitos alimenticios.
Para lograrlo, es necesario conocer qué comen nuestros hijos en la escuela.
Recomendaciones importantes
- - Se debe incluír alimentos de los diferentes grupos: Frutas y verduras, cereales o tubérculos y alimentos de origen animal.
- - Evitar lo más posible los alimentos industrializados (estos suelen ser ricos en grasa, azúcar y/o sodio).
- - Tomar un poco de tiempo para preparar el lunch con alimentos frescos la mayor parte de los días de la semana.
- - Procurar que el lunch sea variado. Existen muchas opciones diferentes que pueden agradar a los niños.
- - Es importante planear el menú para toda la semana con anticipación para ahorrar tiempo y tener todos los ingredientes necesarios a la mano.
- - Ofrecer frutas y verduras frescas al niño en su lunch.
- - Evitar las bebidas azucaradas. El lunch debe incluir siempre alguna bebida para que los niños se mantengan bien hidratados, pero se deben eliminar todas las bebidas con alto contenido de azúcar como los refrescos y jugos industrializados.
- - Evitar los alimentos muy dulces o pegajosos que pueden favorecer el desarrollo de caries.
- - Servir porciones pequeñas de alimentos. Debemos recordar que el lunch debe representar cuando mucho el 20% de las calorías de todo el día, lo cual equivale a unas 200 calorías para los niños preescolares y unas 270 para los escolares como máximo.
- - Servir el lunch en una lonchera limpia y en recipientes agradables, irrompibles y fáciles de manejar.
- - Permitir a los niños participar en la planeación de sus comidas y hasta en la preparación de platillos sencillos.
- - Aprovechar la convivencia con otras personas para ofrecer al niño alimentos que en casa se le dificulte aceptar.
- - Incluir alguna sorpresa para el niño, sobre todo en el caso de los más pequeños, dentro de la lonchera algunas veces.
Recetas de cocina recomendadas para sus hijos:
Pollo Empanizado con Corn Flakes
Rollitos de pollo
Salchichas con Hojaldre
Sandwich de Salmón con Pepino
Nuggets de Pollo con Quinoa