Después de nadar un rato o (¿por qué no?) pasar todo el día tomando el sol en la playa, el hambre se empieza a sentir.
Obviamente, no querrás interrumpir tu descanso yendo a buscar qué comer y, menos, pensarás en estar batallando con ingredientes sobre la arena.
Con estas recetas no tendrás que preocuparte por preparar nada en el momento. Consigue una hielera y organiza tus platillos en recipientes para una comida deliciosa frente al mar:
Esta botana es realmente sabrosa y, al servirse en pequeños pinchos, también resulta muy práctica. Puedes llevar la reducción de vinagre en un recipiente aparte o agregarlo directamente a los higos para que se marinen por más tiempo.
Para ponernos en ambiente playero, a la receta tradicional de guacamole le agregamos un toque tropical con cuadritos de mango fresco. Recuerda agregar jugo de limón para evitar que el aguacate se oscurezca.
No necesitarás cubiertos ni platos para botanear con estos exquisitos bocaditos. Si no encuentras mozzarella, puedes sustituirlo con queso asadero o panela. Eso sí, las hojas de albahaca tienes que estar frescas para conservar el toque italiano.
Cuando estás en la playa, lo mejor es consumir alimentos ligeros y frescos, como esta deliciosa ensalada. Te recomendamos agregar el limón hasta que vayas a comer, ya que con el calor el limón puede amargarse.
Para satisfacer el apetito sin inflamar el vientre (no querrás tener la panza abultada mientras luces tu bikini), lo mejor son los platillos hechos a base de verduras. Aunque en la receta original se incluye pan, puedes usar tostadas de maíz o pan de arroz.
Además de ser un platillo muy rico, esta botana de nopalitos te ayudará a mantenerte hidratada (los nopales están conformados por 80% de agua). Haz tu receta aún más saludable sustituyendo las tostadas de maíz por hojas de lechuga.
Olvídate de los refrescos carbonatados y las bebidas gaseosas. El gas y los azúcares harán que tu vientre se inflame y te sentirás incómoda. Este jugo te ayudará a conservar tu vientre plano en tus visitas matutinas a la playa.
Te sugerimos no colar la bebida; de esta manera, puedes aprovechar los beneficios de la fibra de la papaya. Antes de servirla, recuerda agitar bien para que se mezclen los sedimentos de la papaya con el resto del líquido.
Para el calor de la playa, unas paletas frías de plátano con chocolate son la mejor opción. Asegúrate de conservar las paletas dentro de una hielera bien fría para que el chocolate no se derrita.
Deja de una vez los sándwiches de jamón y queso y disfruta tus vacaciones en la playa con platillos tan ricos como prácticos.